Posturas de Yoga, Asanas

Antes de empezar a hablar de las posturas de yoga, conocidas como asanas, creo que es necesario entender qué es el yoga, conocer los tipos de yoga que existen y entender la finalidad de éstos ejercicios.
Gracias al yoga conseguiremos mejorar nuestra salud, nuestra energía, voluntad y poder de concentración.
Esto no quiere decir que el yoga sea la panacea que devuelva la salud a la humanidad, no. Para que el yoga resulte efecivo, debe ir acorde con un estilo de vida equilibrado, sano y natural.
Será entonces cuando, las posturas o asanas creadas para tratar cada afección o enfermedad obtengan el resultado que esperamos. Pero no adelantemos acontecimientos y asegurémonos que entenemos realmente porque necesitamos practicar yoga.

Qué es el yoga

La palabra yoga viene de la raíz sánscrita yuj, que significa unión entre el ser humano y Naturaleza*, entre la mateia y el espíritu, entre lo pequeño y lo grande, etc.
Los yoguis aseguran que lo que separa al ser humano de la Naturaleza, es su mente, su ego. Igualmente aseguran que cada una de las prácticas yóguicas están encaminadas a la realización de la verdadera naturaleza que el ser humano lleva en su interior. Es enonces cuando se consigue un estado de paz y felicidad.
Dado el tipo de vida que llevamos la mayoría de nosotros (parte del día sentados en la oficina, en el coche en casa...), vemos la necesidad de proporcionarle al cuerpo el ejecicio que necesita para el buen desarrollo o mantenerlo en forma.

En Belladonna has a secret se utiliza la palabra Naturaleza para definir lo que muchos entienden por Dios, Yo superior o cósmos. Por eso cada cual es libre aquí de escojer la palabra que mejor entienda.

La conducta del ser humano es básicamente automática debido a los hábitos aprendidos en el entorno y la familia. Otros encambio los vamos modificando a lo largo de la vida. Dichos patrones de conducta son los responsables de nuestras respuestra predeterminada para cada tipo de circustancias. Tendemos a repetir una y otra vez ese comportamiento aprendido. Como consecuencia, esas respuestas automáticas están fuertemente arraigadas en nuestra mente. Todo esto va perfilando nuestra Ego, del cual solemos ser esclavos la mayoría, y desde el cual justificamos nuestros actos con frases como:

A pesar de querer cambiar, a pesar de saber cómo nos gustaría ser o comportarnos, no conseguimos evitar repetir patrones de conducta. Esto es algo que ya los antiguos sabios estudiaron para conseguir técnicas que nos ayudaran a modificar nuestra conducta volvíendonos más conscientes de nuestras reacciones en la vida cotidiana. Fue así como comenzó el ahora conocido yoga, la meditación y la práctica de sencillos ejercicios que restablecian en el ser humano un sentimiento de unión y de paz interior.
El yoga es pues un método que integra posturas , respiraciones, sonido, posiciones específicas de brazos, manos, cerraduras energéticas que facilitan que nuestra mente tenga una vibración más elevada que la de nuestros patrones de conducta habituales, pudiendo así enfocar las situaciones desde otro punto de vista consiguiendo que tales acciones tengan un sentido más universal-objetivo y menos egoísta-subjetivo.

El yoga es algo más que unos ejercicios, es una filosofía

Humano viene del Sánscrito, del término human concretamente, dónde hu significa "luz" y man significa "mente". Es decir, la palabra nos define como mentes luminosas, y ¿Acaso no es eso lo que busca un yogui?
Cuando empezamos a practicar yoga, su filosofía comienza a desarrollarse, comenzando sin darnos cuenta un ejercicio de auto-reconocimiento dónde cada cual se encuentra consigo mismo y comienza un proceso de autosuperación en el que cada individuo intenta expandir sus limites. Es curioso que, mientras el resto de especies explotan al máximo sus cualidades, es el ser humano quien malgasta la capacidad de su cerebro, desaprovechando el uso total y eficaz del mismo.
Seguramente habrás oído hablar de la filosofía en la que se basa el yoga, la unión entre cuerpo y mente, pero tiene muchísimos más beneficios.

Unas cuantas razones para practicar Yoga

Proporcionarle a nuestro cuerpo el ejercicio adecuado es uno de los factores importantes para el mantenimiento de una buena salud. Muchos optamos por caminar, pero esto no es suficiente.
Puede que esta primera necesidad, la de ejercitar nuestro cuerpo, sea en primera instancia la que nos impulse a practicar yoga, pero descubriremos que ésta no será la meta que persigue el yoga. Este concepto debe quedar claro para evitar desvirtuar la filosofía yóguica. Sólo cuando comienzas a practicar yoga es cuando empiezas a comprender su filosofía. Sea cual sea el motivo que te lleve a esta práctica, enseguida comprenderás que el yoga no es un deporte pero produce importantes mejoras físicas.
Pensar que el yoga se reduce a una serie de ejercicios físicos, más o menos lentos, es no saber lo que es el yoga. Pensar que el yoga es cierto tipo de autosugestión o hipnotismo es no saber que es el yoga. Digo esto, porque ha pesar de ser una práctica bastante de moda hoy en día, hay quien sigue pensando que el yoga es una serie de contorsiones y posturas raras y que a través de ella, y del poder persuasivo del profesor, se consigue una relajación del cuerpo logrando un falso o ficticio bienestar. Nada más lejos de la realidad. Veamoslo mejor con una comparativa las ventajas que presenta la práctica del yoga frente a cualquier deporte o ejercicio físico ordinario:

Qué son las Asanas y cuantos tipos de yoga existen

Asanas es el nombre que reciben las posturas de yoga en sánscrito. Originalmente, asana quería decir asiento, la postura sentada en la cual los antiguos yoguis meditaban. El yoga se creo como ejercicio físico y mental con el que desarrollar la espiritualidad del ser humano siendo la práctica central la meditación. El sabio

Patanjali maestro yogui en sus Yoga Sutras definió el yoga como:

Asana es una acción que implica una actitud física, mental y espiritual. Cuando practicamos yoga y hacemos una postura concreta, estamos haciendo un asana, no es solo un ejercicio físico, un asana se hace con todo nuestro ser.
Existen varios tipos de yoga por una razón muy simple, de la misma forma que un pantalón no nos sirve a todos por igual, existen igualmente varias tallas de yoga que se adaptan a la tipología de cada uno de nosotros, para así abarcar las necesidades de cada uno por igual.

Los yoguis aconsejan tomar un yoga como principal pero utilizarlo con ayuda de los demás ya que la práctica te lleva a conocerte y descubrir cómo ir ajustando la postura desde la sabiduría interior, puesto que el yoga no es algo a imitar. De esta forma, cada persona puede manifestar en esencia cualquier asana si tiene la actitud adecuada, independientemente de su capacidad.
No existe un número deteminado de posturas, ya que con cada escuela, con cada maestro, aparecen nuevas variantes que se ajustan a las necesidades personales, es por eso mismo que cada escuela o maestro, tiene su propia secuencia de ejercicios. Depende de uno mismo encontrar aquel que mejor se ajuste. A medida que continúe la expansión del movimiento del yoga, se producirá un mayor desarrollo de las prácticas de yoga, algunas de ellas conectadas con antiguas enseñanzas, otras alejadas de éstas. Aún recuerdo las palabras del maestro yogui cuando le pregunté cual era el auténtico yoga:

Cuando te planteas empezar a practicar yoga y comienzas a informarte, hay muchas escuelas, gurús, entendidos... que afirman ofrecer el "Yoga Original" o "Verdadero", el mejor, el más efijaz como si de un anuncio se tratara; sin embargo, como bien me explicó aquel primer día de clase el maestro yogui, no existen secuencias de yoga correctas o incorrectas . Más bien se trata de que cada secuencia tiene mayor o menor sentido dependiendo de la persona, la situación o estado vital en la que se encuentre. Por eso, a pesar de existir determinados estilos de yoga adapatados a las necesidades más comunes, cada cual es libre de diseñar su propia secuencia, siempre y cuando sea coherente.

Matizando esta afirmación, hay que decir que es cierto que algunas de ellas si pueden resultar arriesgadas si contradicen en cierta manera los principios más básicos de la secuenciación.

Existe otra modalidad libre de práctica yóguica, el yoga improvisado. Esta práctica manos inexpertas puede causar problemas, en cambio, en yoguis experimentados puede traer maravillosos descubrimientos. Pero para poder llegar a experimentar libremente secuencias de yoga, debemos primero conocer bien las asanas, los beneficios de cada una de ellas, las contraposturas, las técnicas de respiración etc.
Otras de las recomendaciones a la hora de practicar yoga es mantener la atención en la práctica, hacer un ejercicio de auto-observación y meditación permanente.
La práctica de asanas debe reflejar los principios éticos y los valores espirituales del yoga. El yoga a través de una coherente secuencia de asanas nos ayuda a encontrar nuestra humildad, paciencia y compasión. Tanto es así que, en el yoga no encontramos comparaciones ni competencia y aceptamos nuestros límites. Es importante escuchar lo que nuestro cuerpo nos dice para poder llevarlo a encontrar su nivel, de una manera suave y sin forzar sus límites, pero ampliándolos poco a poco de manera paralela a los de tus facultades mentales y espirituales. Debemos practicar con paz interior y dejar los pensamientos y juicios. La práctica de posturas es un proceso siempre cambiante y un viaje dentro de nosotros mismos.

Por qué debemos practicar yoga y cuales son sus beneficios

Las posturas de yoga tienen grandes beneficios físicos y mentales, tal y como la ciencia moderna occidental ha podido comprobar. Una de ellas es que pone a nuestra disposición la fórmula de la Concentración Dinámica. Gracias a ésta, conseguimos la capacidad de pensar de manera selectiva, o dicho de otra forma, conseguiremos ponernos en situación para guiar nuestra vida, una vida que será producto de nuestra elección, lejos de decisiones atomáticas. Es así como conseguimos crear nuestro propio camino a la independencia personal.
Entre losbeneficios físicos que el yoga aporta a nuestro cuerpo los más destacados son:

Los beneficios del yoga favorecen también las capacidades cognitivas como la memoria y la concentración, ayudando asía a muchas personas a mejorar el equilibrio emocional, fortalecer la autoestima y a ser más positivos entre otras cosas.

Las asanas, practicadas de forma consciente beneficia la salud mental, además de aportarnos un sentimiento de plenitud y de integración con algo más grande, que forma parte del crecimiento espiritual asociado con el yoga.
Existe infinidad de posturas en el yoga, hay quien asegura haber contado 1000 diferentes. Muchas de estas asanas toman sus nombres y características del mundo natural: las montañas, los árboles, los animales, los ciclos de la vida. Existen diferentes tipos de clasificaciones para las posturas diseñadas para beneficiarnos de una forma concreta. Una posible clasificación de asanas podría ser aquellas que como base buscan el equilibrio, la inversion, flexión hacia adelante, flexión hacia atrás y torsiones. Sin embargo, hay otras que agrupan las asanas de yoga según la postura dominante, como posturas de pie, posturas de descanso, posturas de inicio, posturas de asiento, posturas de apertura, posturas de recogimiento, posturas de fuerza y posturas de rendición. Puede que algunas posturas estén en más de una categoría y es fundamental combinarlas para tener una práctica más completa, efectiva y obtener todos los beneficios. Es aquí donde cada escuela se diferencia, ya que cada cual enfatiza las que considera esenciales.

Principales posturas de yoga

Sukhasana. Postura fácil

La postura sentada, es una postura con la que podemos comenzar cualquier secuencia de yoga. En esta postura la columna se alarga mientras los hombros se relajan y la barbilla queda paralela al suelo. Con las piernas cruzadas y sentados sobre los isquiones ( huesos situados en la pelvis ) nos concentramos en la respiración y en nuestro cuerpo.

Tadasana. La montaña

La postura de la montaña, es postura suele ser el inicio de otras asanas realizadas de pie. Esta postura nos permite indagar en nuestro cuerpo y tomar conciencia de él.
Realizamos la postura manteniendo los pies juntos, los brazos estirados, la cadera elevada, los glúteos relajados, bajando el sacro y el pecho un poco elevado. La cabeza la mantenemos mirando al frente, de esta forma la coronilla nos ayudará a verticalizar el cuerpo. Los hombros deben estar relajados y los pies deben enraizarse en el suelo en su totalidad, procurando no descargar todo el peso sobre los talones distribuyendo así el peso por igual.

Balasana. Postura del niño

La postura del niño es una postura de descanso, y pertenece a las posturas del yoga que se utilizan para abrir la mente y restablecer la armonía y el equilibrio.
Comenzando desde una posición arrodillada en el suelo, con las rodillas juntas y alineadas dejamos caer las nalgas sobre los talones. Desde aquí estiraremos la columna hacia arriba. Nos inclinaremos hacia delane expulsamos el aire.
Cuando nuestro pecho repose sobre los muslos extenderemos los brazos hacia atrás, a los lados del cuerpo. Apoyándo las manos por la cara inversa a las palmas, eliminaremos la tensión desde los hombros, ensanchando la parte posterior de la espalda. Es importante relaja los codos y el tercio inferior de la espalda.
La postura del Niño es una Asana de yoga perfecta para intercalar con otras de gran dificultad.

Adho Mukha Svanasana. El perro

La postura del perro, es una de las asana clave en la mayoría de las secuencias de yoga ya que utiliza tanto como medio de transición a otras o incluso como postura para encontrar la calma necesaria. En esta postura tratamos de elevar la cadera hacia arriba y hacia atrás. Se puede entender la postura como una “V” invertida. El cuello se debe relajar y los hombros deben quedar alejados de las orejas. En esta postura debemos buscar la comodidad dentro de la dificultad.
Cuando comenzamos a practicar esta asana lo importante es que nuestra espalda se alargue, con la práctica conseguiremos estirar las piernas y apoyar los talones en el suelo.